
Cuando chico me tocó elegir el tipo de ciudadano que quería ser
y me llevaron las malas juntas a un puterío donde me definí
como un heterosexual observador del desnudo femenino, porque aún era niño.
Salí con sed de tanto haber visto carne
y con la plata que me devolvió la puta por no culiarla
me compré el único líquido que ubiqué esa noche en un carro ilegal
Tomando con asco resignado la cerveza a medio helar
me crucé con un cura que me quiso violar
pero justo apareció un lanza y lo asaltó
Entonces entendí que era hora de volver a casa
y en el camino, a medio emborrachar me di cuenta
de que no tenía casa, sino un mundo por habitar
Y de una cornisa bajó una paloma desvelada y solitaria
que supuse era un chuncho, diciéndome en su vuelo
con sabia confianza
Elige entre
el Chile flaite del Colo
el Chile católico de la Cato
o el Chile laico de la U
Y bueno, el resto es historia.